Recientemente, recibimos un correo electrónico de una amiga escritora que estaba preocupada porque su nueva idea no era lo suficientemente emocionante. Si has tenido este tipo de problemas en algún momento no dudes en seguir leyendo porque te ayudaremos a solucionarlo. 😉
La pobre había comparado su idea con el libro Los juegos del hambre, que trata sobre una lucha a vida o muerte. El tema de su novela iba a ser la amistad. Aunque sus personajes enfrentarían algunos problemas, ninguno de ellos tendría riesgos de vida o muerte. Esto la hizo preocuparse de que su idea fuera demasiado trivial.
Imagina dos novelas. La novela A trata sobre un personaje que está siendo perseguido por la mafia. La novela B trata sobre un personaje que tiene problemas para hacer amigos en una nueva escuela.
¿Qué idea es más interesante?
Depende. Imagina que al lector realmente no le importa el personaje de la Novela A. Pero el lector se preocupa profundamente por el personaje de la Novela B y se siente realmente angustiado por el tema de la amistad. En ese caso, la Novela B podría ser mucho más interesante y llena de suspense que la Novela A.
Si quieres mantener el interés de tu lector, la combinación mágica es …
1) Un personaje creíble que al lector le importe.
2) Un conflicto o problema que realmente le importe a ese personaje (incluso si parece pequeño en la superficie).
Si el lector se preocupa por el personaje, entonces el lector se preocupará por lo que es importante para él o ella … ya sea que se trate de escapar de la mafia, encajar en el cole, o encontrar un sello especial para su colección.
Lo he dicho antes: no es tu idea de historia lo que importa, es lo que haces con ella.
Y cuando compares tu escritura con un libro que amas, recuerde esto: solo porque tu enfoque sea diferente, no significa que estés haciendo algo mal.
Al faro, de Virginia Woolf, es un libro maravilloso. También lo es Harry Potter y la piedra filosofal de JK Rowling , que no tiene casi nada en común con la novela de Woolf. Woolf y Rowling tienen estilos y enfoques de la literatura muy diferentes y han elegido temas muy diferentes. Dudo que Virginia Woolf pudiera haber escrito un libro como Harry Potter y la piedra filosofal si lo hubiera intentado.
Tu futuro libro será uno que ni Woolf ni Rowling podrían escribir; ni Charles Dickens, ni Suzanne Collins, ni Vladimir Nabokov, ni Toni Morrison, ni Stephen King, ni Jane Austen …
Será uno que solo tú puedas escribir.